PRESENTACIÓN PROYECTO 峠TM#02

Hoy queremos presentar un "nuevo" proyecto, nuevo entre comillas, ya que, lleva en el garaje desde hace más de 25 años, pero le ha llegado el momento, el momento de quitarle los años de encima, que salga a ver la luz como el día que lo hizo de fábrica, y vuelvan a escucharse sus pistonazos por algún camino...

Así que hoy presentamos la Ducati Scrambler 250cc Serie II, fabricada en Italia en 1972, que lleva parada en el garaje desde hace mucho tiempo.

Una moto muy histórica, pensada inicialmente para el mercado Estadounidense, la primera serie fue lanzada en 1962, fabricada hasta 1968, cuando la sucedió la segunda serie, lo que fueron las verdaderas Scrambler, con motores de cárter ancho, en cilindradas 250 y 350cc, para más tarde salir la 450cc en 1969.

SCR Primera Serie.

SCR Segunda Serie.

Los motores fueron montados con piezas de aquí y de allí, ya que tanto en España (MotoTrans) como en Italia, se fabricaban piezas, lo cual hay motores con distribución desmodrómica, motores con balancines regulables y balancines con "pastillas".

En cuanto a la moto en sí, fue todo un éxito, una de las razones, su excepcional chasis, que se utilizó hasta en carreras de pista, algo que no había sucedido todavía en la historia del motociclismo, la segunda razón, el motor cortado a medida para su función.

En cuanto a prestaciones, no fue la moto más rápida de la época, pero su posición de conducción perfectamente centrada, la hicieron una de las motos más agradables de su tiempo, además, la elegancia de sus clásicas curvas, el contraste de los colores vivos con el chasis y la lágrima cromada del depósito...

Asimismo, ha sido una moto con mucha historia propia, viajó por Francia y Marruecos, hasta que llegó a nuestras manos con bastante deterioro, pintada en color blanco con unas pegatinas hippis doradas, con muchas piezas adoptadas de una Ducati Road (manillar, sillín, bolsas laterales, etc). Ya fue adquirida con la idea de realizar una restauración, desmontando completamente la moto, imprimando el chasis y el depósito, puliendo detalles, reparando el selector de las marchas del motor, ya que solamente engranaba la primera.

Y por último, guardando todo en cajas.

Las cajas fueron su hogar los siguientes 25 años, hasta llegado el momento de retomar el proyecto, por el momento el chasis ha sido arenado y pintado al horno con pintura en polvo negra. 

El depósito, aún en proceso de restauración, se arenó por completo, se repararon unos poros en su base con soldadura oxiacetilénica, con latón como material de aporte y se rediseñó la lágrima, para su posterior cromado y pintado.

Nos despedimos con un vídeo donde se escuchan sus pistonazos!